Con esta frase comenzaba el profesor de física Albert Bartlett sus discursos en los que advertía sobre los problemas del crecimiento de la población y el consumo desbordado de los recursos naturales. La lógica es simple e irrefutable: El crecimiento exponencial, que es simplemente un crecimiento consistente a una tasa porcentual cada determinado periodo de tiempo, no puede proceder indefinidamente dentro de un sistema finito, por ejemplo, el planeta Tierra.
Pero las limitaciones del entendimiento de la función exponencial no se limita a temas sociales y ambientales. En producción este problema también está presente, pues pocas empresas son conscientes de que el tiempo de entrega es una función de la utilización de los recursos y es justamente una función exponencial. Según la teoría de colas, cuando la utilización de un recurso se acerca al 100%, el tiempo de entrega tiende al infinito.
Esto sucede porque a medida que aumenta la utilización de un recurso, es mucho más probable que un requerimiento nuevo deba esperar porque hay otros requerimientos adelante de este. Una formula aproximada que describe la relación entre la utilización y el tiempo de entrega (flujo) es la siguiente:
Tiempo de entrega = Tiempo de servicio / (1 – % de Utilización)
El tiempo de servicio es el tiempo que toma la actividad en ser procesada por el recurso y lo que la fórmula expresa es que si los requerimientos llegan a una mayor velocidad de la que pueden ser procesados en el centro de trabajo, se generará una cola aumentando el tiempo de entrega promedio.
La verdadera revelación viene de observar lo que ocurre en la gráfica cuando la utilización supera el 80%. A continuación presentamos una tabla con los resultados de la fórmula expresada anteriormente, con un tiempo de servicio igual a X.
Nótese que el tiempo de entrega es igual al tiempo del servicio (el tiempo de toque), cuando el centro de trabajo está ocioso. Cuando la máquina está ociosa el tiempo de entrega es exactamente el tiempo de toque puesto que no hay ninguna cola de trabajo al frente del recurso. Cuando el centro de trabajo se acerca al 50% de utilización, el tiempo de entrega se duplica. En este punto, las nuevas órdenes de trabajo a veces encuentran otras órdenes por delante y a veces no, ocasionando que en promedio el tiempo de entrega se duplique.
Según la tabla, el tiempo de respuesta se multiplica por cuatro (4X) cuando el centro de trabajo está al 75% y llega a 10X cuando la utilización está al 90%. Este efecto exponencial sucede por el hecho de que el centro de trabajo casi siempre está ocupado y por ende habrá más órdenes de trabajo esperando a ser procesadas en la fila.
Este concepto de la teoría de colas no es muy conocido en la industria, pues de lo contrario las empresas no utilizarían indicadores de productividad y eficiencia que incentivan precisamente altas utilizaciones, con metas superiores al 90%. Todo lo contrario, ¡debería haber un límite superior de utilización ¡el cual no queremos que ningún recurso supere!
*Este es un extracto de nuestro próximo e-book titulado “Los Tres Pilares Universales del Flujo”. Lo invitamos a que siga nuestra página en Facebook en el siguiente link: www.facebook.com/simplesolutionssas para que esté enterado de su lanzamiento.